martes, julio 31, 2012

De masas bobas, inútiles crónicas, genios y creativos

"Las grandes obras las sueñan las genias locas, las ejecutan las luchadoras natas, las disfrutan las felices cuerdas y las critican las inútiles crónicas"
Ramón y Cajal

Ayer empecé a ver una entrevista a la médica Guis la Divina. La llamo así porque ella misma se proclama divina y lo explica. Ella es la máxima autoridad de su vida y crea su vida en función de su autoridad y de las responsabilidades que quiere asumir. Todas las personas son la máxima autoridad de sus vidas, caer en las lamentaciones y en el victimismo y esperarlo todo a cambio de dar lo mínimo es propio de borregos (ella los llama "mouton", en francés y en los subtítulos se lee borrego).

"Laine" en francés quiere decir lana y el nombre que le pusieron al nacer fue Guislaine, su apellido Lanctôt. Como no quería tener lana ni nada que se pareciese a un borrego, ahora sólo se llama Guis.


Según Guis, se pueden identificar cuatro estados de evolución de la conciencia humana que identifica con dos animales:


Continúa
1. Cordero / borrego blanco: su actitud es la inacción, es un estado de conciencia muerta. Dependen de autoridades externas y se muestran sumisos bajo el yugo del miedo y de la esclavitud. Se considera una víctima de un salvador culpable. Así que lo único que le queda es sufrir y atacar cuando percibe que no va a salir dañado.

2. Cordero / borrego negro: su actitud es la reacción, en un estado de supervivencia. También depende de autoridades externas y aunque viven bajo el yugo del miedo y la esclavitud, son insumisos. Sufren desde la impotencia como si todo fuese una tragedia, en posición defensiva.

A partir de este último estado de la conciencia, se puede tomar la decisión de la transformación a un estado de autoridad interior:

3. Yegua soberana: su actitud es la acción desde la soberanía individual. Desde el amor y la libertad ligada a las responsabilidades que el amor y la libertad conllevan, es una conciencia creadora con paz y orden interior. Vive en la alegría, para mí debería identificarse con la felicidad, ya que el estadio superior de la conciencia (yegua alada) debería ser la harmonía.

4. Yegua alada: según Guis, su actitud es la creación ilimitada, para mí, la actitud de este estado superior de conciencia debería ser proactiva. Desde la solidaridad universal es todopoderosa y crea paz y orden mundial. Vive en la comedia, como ya he dicho antes, para mí debería ser en la harmonía.

Ramón y Cajal en la frase inicial de esta entrada, obvia los corderos blancos y hace otro tipo de clasificación de la sociedad.

3 comentarios:

José María Arroyo Bermúdez dijo...

La yegua alada bien podría ser Pegaso. Yo quiero ser Pegaso...lo siento por los borregos. Un abrazo.

Cris Pérez dijo...

Pues yo empiezo a no sentir nada por los borregos. Antes sentía lástima, a veces, me sentía rechazada y me hacía sufrir. Luego pasé a la ira, sentir que un borrego te da lecciones, dándote golpecitos en la espalda era horrible.

Se acabó. Lo mejor es que dejen de perjudicarme, supongo que lo mejor debe ser ignorarlos.

¡Echo de menos nuestro aprendizaje dialógico!

Josep Nogue dijo...

Me pemito dejar este enlace por su relación con la imagen de Pegaso, done se muestra un punto de vista tal vez divergente con el aquí propuesto, pero también basado en su aspecto simbólico. Debo aclarar que el texto que aquí aparece es únicamente una parte del capitulo correspondiente.
http://josepnogue.com/index.php/category/manual-del-creador/