¿Habéis volado en avión por la noche? ¿Os habéis fijado en la red de infraestructuras iluminadas que nos conectan? Desde la ventanilla, asomáis la cabeza y veis todos los núcleos urbanizados con luz, de un núcleo salen líneas de luz que se conectan con otros nodos y se ramifican por toda la tierra que podéis ver desde la diminuta ventana del avión.
Es un espectáculo grotesco. Nos extendemos como una telaraña por la tierra, invadimos bosques, aguas, puertos, montañas y mesetas, somos un parásito envolviendo con nuestras finas garras a nuestra anfitriona a la que asfixiamos.
Somos muchxs ¿y lo peor? Que tenemos demasiadas herramientas que no sabemos cómo utilizar y simplemente nos dedicamos a explotar lo que nos dan. Somos absurdxs. Vemos cómo explotamos el territorio, pero como no nos sentimos responsables directxs, nos tapamos los ojos y continuamos explotando cosas en algún lugar desde cual no vemos las consecuencias de nuestros actos y si las vemos, reclamamos a quienes nos dirigen que nos tapen los ojos con distracciones.
Continúa
Ahora la bomba de relojería que todxs sabíamos que iba a explotar, ha explotado, no la del planeta tierra, que pronto lo hará, sino el invento imaginario de las burbujas diversas para hincharnos a hacer horas extras o a invertir en burbujas inventadas para hacer más dinero para comprar más cosas y pedir nuevos créditos para hacer más horas extras y empobrecernos cada vez más. ¡Si es que hoy en día no se puede ni comer pan de verdad!
Nos venden ese derivado que parece chicle a 30 céntimos, cargado de grasas y de dios sabe cuántos aditivos insanos que hasta pueden cocinar en las gasolineras. ¡Y a eso lo llaman pan!
Pensad en las consecuencias de vuestros actos, pensad en cada vez que cogéis el coche para ir a comprar el pan. ¿Es eso normal? ¿Es normal gastar 1 litro de carburante que está a 1’35€ (por poner un precio) para comprar una barra de pan en una gasolinera? ¿Es normal que decidamos gastar 1’90€ (litro de carburante + precio de la pseudobarra de pan) en lugar de ir paseando tranquilamente hasta el horno de pan de toda la vida, donde la persona ha estado trabajando la masa desde bien temprano para tener pan de verdad y que si no quiere cerrar su chiringuito tiene que cobrar su pan a 2€?
¿Es normal que decidamos darle más poder a las grandes corporaciones y distribuidoras (gasolineras) que a la artesana que elabora su pan? ¡Ah! Claro, es que la artesana tiene un tren de vida, es que la artesana no me cae bien, es que la artesana solo genera su puesto de trabajo… ¡Claaaaaro! Es mucho mejor financiar el coche y las casas del que tiene la gran multinacional. Es mucho mejor que sea él quien controle lo que debemos comer, nuestros horarios de trabajo, la planificación de nuestras ciudades y que nos recorten la sanidad y la educación pública para que él pueda seguir financiando las carreteras con las que distribuir su carburante. ¡Claaaaro! Porque la harina que necesita la artesana, el aceite y la sal que a su vez debería comprar a artesanxs autónomxs no son suficientes para generar los puestos de trabajo de la multinacional. ¿Verdad?
A falta de tiempo de buscar los datos de los puestos de trabajo que generan las pequeñas empresas y los puestos de trabajo de las grandes empresas, dejo que trabajéis un poquito si tenéis curiosidad. Pero tampoco hace falta tener mucha imaginación para pensar en la resiliencia que puede tener una sociedad que cuenta con 50000 empresas con una persona trabajadora y la que puede tener una sociedad con una sola empresa con 50000 personas trabajando. Así que eso, seguid cogiendo el coche para comprar en grandes superficies o en gasolineras y seguid pensando que vosotrxs no tenéis poder para cambiar las cosas.
Así esas pequeñas luces diminutas que se ven desde el avión y que conforman esa horrible telaraña seguirá haciendo lucecitas mientras recortan la sanidad o la educación.
Somos muchxs ¿y lo peor? Que tenemos demasiadas herramientas que no sabemos cómo utilizar y simplemente nos dedicamos a explotar lo que nos dan. Somos absurdxs. Vemos cómo explotamos el territorio, pero como no nos sentimos responsables directxs, nos tapamos los ojos y continuamos explotando cosas en algún lugar desde cual no vemos las consecuencias de nuestros actos y si las vemos, reclamamos a quienes nos dirigen que nos tapen los ojos con distracciones.
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Ahora la bomba de relojería que todxs sabíamos que iba a explotar, ha explotado, no la del planeta tierra, que pronto lo hará, sino el invento imaginario de las burbujas diversas para hincharnos a hacer horas extras o a invertir en burbujas inventadas para hacer más dinero para comprar más cosas y pedir nuevos créditos para hacer más horas extras y empobrecernos cada vez más. ¡Si es que hoy en día no se puede ni comer pan de verdad!
Nos venden ese derivado que parece chicle a 30 céntimos, cargado de grasas y de dios sabe cuántos aditivos insanos que hasta pueden cocinar en las gasolineras. ¡Y a eso lo llaman pan!
Pensad en las consecuencias de vuestros actos, pensad en cada vez que cogéis el coche para ir a comprar el pan. ¿Es eso normal? ¿Es normal gastar 1 litro de carburante que está a 1’35€ (por poner un precio) para comprar una barra de pan en una gasolinera? ¿Es normal que decidamos gastar 1’90€ (litro de carburante + precio de la pseudobarra de pan) en lugar de ir paseando tranquilamente hasta el horno de pan de toda la vida, donde la persona ha estado trabajando la masa desde bien temprano para tener pan de verdad y que si no quiere cerrar su chiringuito tiene que cobrar su pan a 2€?
¿Es normal que decidamos darle más poder a las grandes corporaciones y distribuidoras (gasolineras) que a la artesana que elabora su pan? ¡Ah! Claro, es que la artesana tiene un tren de vida, es que la artesana no me cae bien, es que la artesana solo genera su puesto de trabajo… ¡Claaaaaro! Es mucho mejor financiar el coche y las casas del que tiene la gran multinacional. Es mucho mejor que sea él quien controle lo que debemos comer, nuestros horarios de trabajo, la planificación de nuestras ciudades y que nos recorten la sanidad y la educación pública para que él pueda seguir financiando las carreteras con las que distribuir su carburante. ¡Claaaaro! Porque la harina que necesita la artesana, el aceite y la sal que a su vez debería comprar a artesanxs autónomxs no son suficientes para generar los puestos de trabajo de la multinacional. ¿Verdad?
A falta de tiempo de buscar los datos de los puestos de trabajo que generan las pequeñas empresas y los puestos de trabajo de las grandes empresas, dejo que trabajéis un poquito si tenéis curiosidad. Pero tampoco hace falta tener mucha imaginación para pensar en la resiliencia que puede tener una sociedad que cuenta con 50000 empresas con una persona trabajadora y la que puede tener una sociedad con una sola empresa con 50000 personas trabajando. Así que eso, seguid cogiendo el coche para comprar en grandes superficies o en gasolineras y seguid pensando que vosotrxs no tenéis poder para cambiar las cosas.
Así esas pequeñas luces diminutas que se ven desde el avión y que conforman esa horrible telaraña seguirá haciendo lucecitas mientras recortan la sanidad o la educación.
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